tener mala pata
Tener mala suerte. Qué mala pata tengo, hoy, que acabo de limpiar los cristales, se pone a llover. Creen muchos supersticiosos que las patas de algunos animales, especialmente las del conejo, traen buena suerte y las usan como amuletos. La mala pata sería, pues, la que no produjera el efecto deseado.
Diccionario de refranes, dichos y proverbios