bigote
Entre los germanos, llevar barba y bigote era una especie de símbolo de honor. No había mayor insulto para un germano que el hecho de que alguien le tirara de la barba. Parece ser que, antes de entrar en batalla, se llevaban la mano al bigote, residencia del valor y de la hombría, y se encomendaban a su dios exclamando «bî God!», 'por Dios'. Los habitantes de la Península asociaron estas palabras con el pelo que les crecía sobre el labio superior, que pasó a denominarse bigote.
Diccionario del origen de las palabras