prestigio
(Del latín "praestigium".)
Originalmente significó ilusión o engaño causado por truco de magia. En francés evolucionó a renombre o relumbre de una persona en su actividad profesional o artística y en español adquirió el mismo significado a partir del siglo XVIII. La escritora Fernán Caballero introdujo "desprestigio" como pérdida de reputación o cualidades de una persona.
Diccionario literario