lacorro

m. y f. (marginalidad) Niño. Muchacho. Al igual que sucede con otras muchas voces, el argot de los marginales recurre al caló para crear su lenguaje, dada la dificultad para descifrar el sentido de las palabras de esta lengua. Asimismo se apodera de la singularidad de unos signos lingüísticos, de unas señas de identidad que sólo los integrantes del grupo marginal conocen. Estos préstamos se agrupan en unos campos léxicos determinados, entre los que destacan especialmente el cuerpo humano y las relaciones de parentesco. En este último campo se integra la voz lacorro, que junto a chaborró, churumbel, designa a los niños y jóvenes, o bato 'padre', bata 'madre', plas 'hermano', etc. En concreto, lacorro sufre una ligera variación semántica, puesto que en caló significa 'mozo', 'soltero'. Este tipo de préstamos se produce sobre todo a finales del siglo XIX, y por ello, lacorro ya se documenta en el Diccionario de argot común español de L. Besses (1905). Con posterioridad a esta fecha, el caló se ha ido desintegrando y ha perdido su influencia en el lenguaje marginal. En ocasiones es frecuente emplear esta voz en diminutivo: lacorrillo o lacrorillo. Claro que hay muchos LACORROS en el patio de la escuela. Es la hora del recreo.

Recurso: Diccionario de argot on Buho.Guru