A santo que no me agrada, ni padrenuestro ni nada.

En sentido general, se utiliza como expresión de antipatía personal, si bien no faltan aquellos que, llegado el caso, interpretan literalmente el refrán, como lo hizo el tirano argentino Rosas, que un buen día depuso a Martín de Tours, santo patrón de Buenos Aires, «por flojo y mal liberal».

Recurso: Diccionario de refranes, dichos y proverbios on Buho.Guru