Gordo te veas y pordiosero seas.

Por «maldición de la gitana» se conoce este refrán, obviamente disuasorio del impulso caritativo. Concuerda con aquello que una vez le espetó uno a cierto mendigo metido en carnes de cuyo cuello pendía este rotulillo: «Tengo anvre.» «-Será hambre de ortografía, amigo, porque con ese talle...».

Recurso: Diccionario de refranes, dichos y proverbios on Buho.Guru