Pésames, pascuas y días, el hombre que aquí vive ni los da ni los recibe.

Se dice que éste fue el aviso que un hombre que aborrecía los cumplimientos sociales puso en la puerta de su casa. Convertido en refrán, suele aplicarse a las personas de talante huraño.

Recurso: Diccionario de refranes, dichos y proverbios on Buho.Guru