dejado de la mano de Dios

Abandonado a su suerte. Sin que nadie haga caso. Como si la única solución posible para remediar el abandono fuese una intervención divina. Se aplica más a cosas que a personas. Mira que huerto más enorme, pero claro, como no lo cuidan, está dejado de la mano de Dios.

Recurso: Diccionario de refranes, dichos y proverbios on Buho.Guru