dejarse llevar por la corriente

Permitir una persona que le afecten todas las opiniones o formas de actuar y no tener las suyas propias. La imagen es clara: la persona que está en un río o en el mar a merced de las corrientes, sin poder avanzar hacia donde quiere. Antes a Mariano no le gustaban las películas de Spielberg, pero ahora se ha dejado llevar por la corriente y le encantan. (Ver Seguirle a alguien la corriente.)

Recurso: Diccionario de refranes, dichos y proverbios on Buho.Guru