irse de rositas

Salir beneficiado de una situación, metafóricamente hablando un ramo de rosas, en la que lo merecido sería un castigo. Pues si me llega a llamar eso a mí no se va de rositas, no, porque, como mínimo, le atizo un bofetón.

Recurso: Diccionario de refranes, dichos y proverbios on Buho.Guru