llevar a alguien al huerto

Engañar a alguien para conseguir un propósito. Por lo general, el engaño al que se alude es de tipo amoroso. O sea, que te ha pedido diez mil pesetas y te ha dicho que mañana te las devuelve... Pues me parece que te ha llevado al huerto, porque a mí me hizo lo mismo hace tres años... El huerto como lugar de engaño parece aludir al Huerto de los Olivos, lugar en el que tuvo lugar la traición de Judas. De todas formas, como centro de citas y engaños amorosos, su uso es abundantísimo en la literatura medieval y renacentista. Baste referirnos a La Celestina y al Huerto de Calisto y Melibea, situado en Salamanca y donde, según la tradición, se produce el primer encuentro entre los dos amantes.

Recurso: Diccionario de refranes, dichos y proverbios on Buho.Guru