O.K.

Sobre la procedencia de la forma más internacional de decir de acuerdo, transcrita a veces como okay y acompañada frecuentemente por el gesto de formar un círculo con el índice y el pulgar de la mano derecha, lo único cierto que podemos afirmar es que se originó en Estados Unidos.

La teoría más aceptada afirma que apareció durante la campaña de las elecciones presidenciales llevada a cabo en 1837 por Martin van Buren, originario de Old Kinderhook (Nueva York). El nombre de esta pequeña localidad, abreviado en sus iniciales, O.K., fue usado para dar nombre a la asociación creada por sus seguidores en Nueva York para sostener económicamente la campaña: el O.K. Club. La victoria de Van Buren, apodado «el zorro rojo de Old Kinderhook», que fue presidente del país más poderoso de la Tierra entre 1837 y 1841, contribuyó seguramente a trasladar el éxito a la labor desempeñada por su club y a la propia denominación de éste, que acabaría siendo, ya para siempre, símbolo de que todo va bien o de que se está de acuerdo con algo o con alguien.

Hay también quien quiere ver en O.K. lo opuesto al K.O. (knock out, 'fuera de combate') del boxeo. Contrariamente a lo que sugerirían los sentimientos -si es que en ese momento los tiene- del boxeador que queda grogui tendido en la lona tras haber recibido el puñetazo de su adversario, el significado de O.K. sería algo así como 'correcto, de acuerdo, todo bien'.

Por último, y aunque la teoría no parece tener mucho fundamento, se ha dicho también que O.K. son las iniciales de oll korrect, alteración gráfica con la que se intentaría transcribir la pronunciación de la expresión del inglés all correct, es decir, 'todo correcto, no hay problema, todo va bien'.

Sea cual fuera su origen, el caso es que la expresión se extendió rápidamente por todo el país, y se acabó haciendo de uso tan común que hoy, incluso, existe en el inglés de Estados Unidos el verbo to okay con el significado de 'aprobar, estar de acuerdo'.