Biblioteca selecta de amena instrucción

(La Habana, 1836-1837). Publicación concebida, según palabras de su editor y redactor, Mariano Torrente, con el propósito de «metodizar una porción de apuntes y estractos que desde muchos años he ido formando en el acto de leer las mejores obras sobre varias materias escritas en español, latín, francés, inglés e italiano, i de ofrecerlos al público en un cuerpo de obra, titulada Biblioteca selecta de amena instrucción» [sic]. El primer tomo se publicó en junio y el último (12) en mayo de 1837. En la página 236 del tomo 2 de su obra Apuntes para la historia de las letras y de la instrucción pública en la isla de Cuba (La Habana, Academia de Ciencias de Cuba. Instituto de Literatura y Lingüística, 1971), Bachiller señala lo siguiente: «Prohibida la licencia para que se publicaran periódicos sin la voluntad soberana, se conseguían para imprimir obras por entregas en que se eludía la prohibición. El señor Torrente fue el que ideó el medio de verificarlo y con gran provecho, pues fue muy numerosa la suscripción que consiguió». En cuanto al contenido, su propio autor expresaba en el primer tomo que en las páginas de su obra «se hallarán alternativamente capítulos cortos i variados sobre los siguientes puntos: Principios jenerales sobre los varios ramos del saber humano; útiles invenciones i progresos en las ciencias naturales; reglas i trozos de elocuencia i poesía; rasgos históricos de los más brillantes; sucesos raros; dichos agudos; máximas y ejemplos de virtud; sentencias de los antiguos filósofos; descubrimientos jeográficos i astronómicos; cuestiones económicas; discursos filosóficos; apuntes estadísticos; curiosidades i fenómenos; parte biográfica y bibliográfica; disertaciones sobre varias materias; estracto de algunos viajes modernos; i por último algunas novelas jugosas i deleitables, algún drama i cuantas flores i encantos ha podido prestarme la literatura para amenizar y embellecer esta miscelánea de útil y agradable instrucción» [sic]. No trató asuntos cubanos en ninguno de sus números. Su salida provocó una violenta polémica que se mantuvo durante casi todo el segundo semestre de 1836, fundamentalmente desde las páginas del Diario de la Habana. En el último tomo, Torrente presentó un índice general de las materias contenidas en los doce volúmenes. Además, Araceli García-Carranza ha confeccionado su índice, que se encuentra a disposición del público en las gavetas de la hemeroteca del departamento Colección Cubana de la Biblioteca Nacional José Martí.

Recurso: Diccionario de la Literatura Cubana on Buho.Guru