Cuba y América

(New York, 1897-1898; La Habana, 1899-1917). Periódico quincenal ilustrado, dedicado a los países Hispanoamericanos. El número inicial apareció el 1º. de abril. Fue, según se señalaba en sus páginas, una publicación de «política, intereses generales y variedades», con «crítica, sátira, ilustraciones y caricaturas». Durante toda su existencia fue dirigida por Raimundo Cabrera, quien firmaba algunos de sus artículos con el seudónimo Ricardo Buenamar. Desde el 1º. de enero de 1898 apareció como «Periódico semanal ilustrado, dedicado a los países Hispano-Americanos». Su periodicidad pasó a ser mensual a partir de agosto de 1898. El último número publicado en Nueva York corresponde a septiembre de ese año. Mientras Cuba y América se editó en Nueva York, se definió como una publicación dedicada a los emigrados cubanos que «tratará de responder dentro de su esfera al estado de espíritu, a las necesidades que en la emigración se manifiestan, y al lado de los periódicos que con más autoridad y títulos llevan en Nueva York y en distintos lugares de América la enseñanza del combate -combatiendo también modesta y resueltamente-, será en otro orden de ideas y de labor, como el órgano en que los amantes de las letras y de los estudios políticos y críticos, reflejen sus elucubraciones en estos días amargos de incertidumbres y de destierros». La mayoría de los trabajos se referían a la insurrección en Cuba, narraban episodios de la guerra, tanto en prosa como en verso. Tuvo una sección de «BIBLIOGRAFÍA», que comentaba los últimos libros publicados. Entre los más asiduos colaboradores de esos años figuraban Enrique José Varona, Manuel Sanguily, Nicolás Heredia (quien en ocasiones utilizaba el seudónimo Mostaza), Esteban Borrero Echeverría, Martín Morúa Delgado, Benjamín Giberga, Pedro Santacilia, Francisco de Paula Coronado, los hermanos Carlos Pío y Federico Uhrbach, Rafael de Castro Palomino, Bonifacio Byrne, Justo de Lara (seud. de José de Armas y Cárdenas), Francisco Sellén, Néstor Ponce de León, Luis Montané. Muchas colaboraciones aparecían firmadas con seudónimos, tales como Nadie (Juan Antonio García), Pompeyo (Antonio González Curquejo), Lohengrin (Francisco García Cisneros). Al cese de la dominación española, la publicación comenzó a imprimirse en La Habana como «Revista ilustrada». El primer número editado corresponde al 6 de febrero de 1899. Su periodicidad fue quincenal hasta el 20 de octubre de 1900. Aparecían en el machón, como redactores, Nicolás Heredia y Leopoldo Cancio; como director artístico, Ricardo de la Torriente, y como colaboradores, entre otros menos conocidos, Isaac Carrillo, Carlos M. Trelles, Vidal Morales y Morales, Bonifacio Byrne, Alfredo Zayas, Benjamín Giberga, Tomás Estrada Palma y Andrés Segura Cabrera. Entre el 5 de agosto de 1900 y el 20 de octubre del propio año fungió como director accidental Vidal Morales y Morales. A partir de noviembre de 1900 su formato se hizo más pequeño. Desde ese número la publicación adquirió una proyección más universal, pues comenzaron a aparecer traducciones, temas científicos, novelas europeas. A partir del 1º. de enero de 1901 el formato volvió a ser mayor. El cuerpo de redacción estaba formado, entonces, por Adrián del Valle, Fernando de Zayas, Antonio González Curquejo, Jesús Castellanos, Ramón Meza y Ramiro H. Portela. El 8 de diciembre de 1901 empezó a salir, independiente de la edición mensual, una semanal que publicó entre otros materiales, novelas como Francisco, de Anselmo Suárez Romero, poemas y crónicas de teatro. A partir del 13 de septiembre de 1903, la revista se editó semanalmente. Desde el 6 de octubre de 1906 el formato volvió a ser mayor y presentó el subtítulo «Revista semanal. Política, ciencias, literatura, artes, variedades». Como jefe de redacción fungía Adrián del Valle; como redactores encontramos a Leopoldo Cancio, Antonio González Curquejo, José de Armas, Fernando Ortiz, Lorenzo Frau Marsal, Jesús Castellanos, Ramiro Hernández Portela, Aniceto Valdivia, Fernando de Zayas y Blanche Z. de Baralt, entre otros. En el grupo de colaboradores estaban Ramón Meza, Juan Santos Fernández, Manuel Valdés Rodríguez, Héctor de Saavedra, Enrique Piñeiro, Eulogio Horta, Francisco Sellén, Francisco García Cisneros, José G. Villa, Luis Rodríguez Embil, M. Rodríguez Embil y Eduardo de Ory. A partir del 2 de noviembre de 1907 fue su administrador Adrián del Valle. Desde el 4 de diciembre de ese año volvió a cambiar de formato y comenzó a editarse dos veces por semana. Como director artístico fungía Aurelio Melero. Entre el 2 de julio de 1908 y el 14 de enero de 1909 volvió a ser semanal. Desde febrero de 1909 a noviembre de 1910 su periodicidad fue mensual. La redacción de la revista manifestaría, por esta época, que el propósito de esta publicación es «contribuir a la cultura y regeneración del pueblo cubano. Recordarle su historia, sus ideales, la especialidad de su estado político y su deber de afianzar su Constitución con la práctica recta de los principios democráticos que la informan: de desprenderse de los errores e influencias de su pasado y regir sus destinos con personalidad propia y espíritu americano». En mayo de 1910 apareció el boletín diario El Tiempo, que salió hasta mediados del año 1912, y que tuvo la misma dirección y administración que la revista. Desde el 5 de diciembre de 1910 la publicación cambió de formato y se editó semanalmente; entre el 5 de febrero de 1911 y febrero de 1912 fue mensual. Salvador Salazar fungió como administrador desde el 3 de septiembre de 1911. A finales de febrero de 1912 volvió a salir semanalmente, hasta el 26 de abril de 1913. El 16 de marzo de 1912 aparece Salvador Salazar como jefe de redacción. En el número correspondiente al 26 de abril de 1913 ya mencionado, en una nota del director de la publicaci6n, se señala que «con el presente número, Cuba y América se despide de sus antiguos abonados. A los 16 años de su fundación [...] sentimos flaquear la pluma y ansias de reposo». Reapareció en octubre de 1913, ahora en su segunda época y con un tamaño menor, como publicación mensual. Fueron redactores y colaboradores Max Henríquez Ureña, Domingo Figarola Caneda, Agustín Acosta, Emilia Bernal, Fernando Ortiz, Arturo R. de Carricarte, René Lufríu, Adrián del Valle, Fernando Figueredo, Héctor de Saavedra, Aurelio Miranda, Salvador Massip, Félix Lizaso. Durante todos esos años la revista publicó cuentos, secciones bibliográficas, poemas, capítulos de libros, fragmentos de novelas, traducciones, materiales históricos cubanos e internacionales. Entre otros libros editó, por capítulos, El laúd del desterrado, Poesías de Joaquín Lorenzo Luaces y De tierra adentro, de Jesús Castellanos. El último número publicado corresponde a abril de 1917.

BIBLIOGRAFÍA «Aniversario de Cuba y América», en Cuba y América. La Habana, 2ª. época, 18, 2 (1): 2, oct., 1914. | Bueno, Salvador. «Cuba y América (1897-1917)», en Universidad de la Habana. La Habana, 30 (177): 153-169, ene.-feb., 1966. | Cabrera, Raimundo. «Cuba y América», en Cuba y América. La Habana, 13, 29 (1): 5-6, feb., 1900; «Historia de Cuba y América», en Cuba y América. La Habana, 15, 34 (1): 9-13, nov, 5, 1911. | «Con los tiempos», en Cuba y América. La Habana, 10, 22 (11): 1, oct. 6, 1906. | «Cuba y América en su segunda época», en Cuba y América. La Habana, 2ª. época, 18, 3 (1): 2, oct., 1914. | «Lo que fuimos y lo que somos», en Cuba y América. La Habana, 2ª. época, 17, 1 (1): 4, cct., 1913.

Recurso: Diccionario de la Literatura Cubana on Buho.Guru