El Almendares

1) (La Habana, 1852-1853). Periódico semanal, literario y de modas, redactado por Ildefonso de Estrada y Zenea y Juan Clemente Zenea, quienes lo dedican al bello secso [sic]. Comenzó a salir el 18 de enero. El primer tomo se completó el 16 de mayo del propio año, con la entrega número 18, conjuntamente con la cual entregaron la carátula y el índice correspondiente al mismo. El 25 de mayo comienzan a distribuir las entregas semanales del segundo tomo, cuya publicación se extiende sin interrupción hasta el 4 de julio (aunque por error de imprenta dice junio); su salida se suspende, entonces, durante tres semanas. Reaparece el 1º. de agosto y anuncian que comienza una segunda época del segundo tomo. Sale ahora quincenalmente. Según señala Feliciana Menocal en la página 23 de Índices analíticos (La Habana, Biblioteca Nacional José Martí. Depto. Colección Cubana, 1964), en este momento Juan Clemente Zenea «se separa de la dirección aunque se queda como colaborador». De forma regular sólo salieron dos entregas. Su publicación cesa por tres meses. El 15 de noviembre se reanuda, y con la cuarta entrega (1º. de diciembre) reparten la carátula y el índice de las dos épocas del segundo tomo. Los datos que aparecen en la carátula corresponden a la segunda época. En el último número de este tomo se menciona a Rafael Otero como «compañero de redacción». A mediados de enero de 1853 comienzan a repartir la primera entrega del tercer tomo, del cual no se ha visto ningún ejemplar. Carlos M. Trelles señala, en la página 241 del tomo tercero de su Bibliografía cubana del siglo XIX (1841-1855) (Matanzas, Imp. de Quirós y Estrada, 1912), que «el tercer volumen tiene 228 ps.». José M. Labraña expresa, en la página 652 de su trabajo «La prensa en Cuba» -aparecido en Cuba en la mano. Enciclopedia popular ilustrada (La Habana, Úcar, García, 1940, p. 649-786)-, que este tomo «amplió el tamaño y en él empezó a publicar sus dibujos el célebre Patricio de Landaluce». Los redactores eran ahora, según el propio Labraña, José Fornaris y Rafael Otero. Trelles menciona también, en su obra antes citada, a Ildefonso Estrada y Zenea, dato éste que él atribuye a Vidal Morales. La revista presentó en sus páginas trabajos inéditos de autores cubanos y eliminó las traducciones románticas que tanto abundaban en las publicaciones de la época. Tuvo una sección fija de pensamientos de cubanos ilustres. La sección «Espejo del corazón» -en la que aparecían artículos sobre moral y sobre la educación de la mujer- era redactada por Juan Clemente Zenea, de quien además se publicaron poesías y otros trabajos en prosa, algunos firmados con su seudónimo Adolfo de la Azucena. Fueron colaboradores José Fornaris, Ramón de Palma, Rafael María Mendive, Ramón Zambrana, Felipe López de Briñas, Luisa Molina, Rafael Otero, Narciso de Foxá, José Agustín Quintero, José Gonzalo Roldán, Francisca González Ruz. Preparado por Feliciana Menocal, con la colaboración de Araceli García-Carranza, se ha publicado su índice analítico, aparecido en Índices analíticos (La Habana, Biblioteca Nacional José Martí, Depto. Colección Cubana, 1964, p. 27-35).

BIBLIOGRAFÍA Chacón y Calvo, José María. «El Almendares», en Revista de la Biblioteca Nacional. La Habana, 2ª. serie, 7 (2): 91-112 abr.-jun., 1956. |[Menocal, Feliciana]. «El Almendares», en Índices analíticos. La Habana. Biblioteca Nacional José Martí. Depto. Colección Cubana, 1964, p. 23-26.

2) (La Habana [1881-1883]). «Diario dedicado principalmente a las señoras», se lee como subtítulo en el ejemplar más antiguo encontrado, correspondiente al 1º. de julio de 1882. Carlos M. Trelles señala, en la primera parte de su trabajo «Bibliografía de la prensa cubana (de 1764 a 1900) y de los periódicos publicados por cubanos en el extranjero» -en Revista Bibliográfica Cubana (La Habana, 2 (7): 20, ene.-feb., 1938)-, que comenzó a salir el 3 de mayo de 1881. Fue fundado por Diego Vicente Tejera, quien aparecía, además, como director honorario. Era su director Pablo Hernández. Como redactor figuraba Vivino Govantes y Govantes, quien desde abril era también su propietario. Dedicaba dos de sus cuatro páginas a anuncios comerciales. Las dos restantes las ocupaban con trabajos de carácter literario: críticas, cuentos, poesías, folletines. También incluían artículos sobre arte, modas e intereses generales. Fueron sus colaboradores, entre otros, Enmanuel (seud. de Manuel de la Cruz), Henry (seud. de Enrique Hernández Miyares), Mercedes Matamoros, Antonio Bachiller y Morales, Nicolás Heredia, Emilio Bobadilla, José Varela Zequeira, Aurelia Castillo de González, Domitila García de Coronado, Pedro Giralt, lsaac Carrillo y O'Farrill, Julio Rosas (seud. de Francisco Puig y de la Puente), J. C. (¿seud. de Rafael María Merchán?). Se afirma que José Martí colaboró en este periódico, pero en los ejemplares consultados (julio a noviembre de 1882) sólo apareció su artículo sobre Darwin, reproducido de La Opinión Nacional, de Caracas. El último número encontrado corresponde al 30 de noviembre de 1882; pero Trelles indica, en su mencionado trabajo, que salió hasta febrero de 1883.

Recurso: Diccionario de la Literatura Cubana on Buho.Guru