El Liberal Habanero

(La Habana, 1823-[Id?]) Periódico. «El Liberal habanero» -expresan Los redactores en el prospecto-, bajo los auspicios de los redactores del Americano Libre [sic], que más desembarazados ya de las ocupaciones que hicieron suspender su publicación, están espeditos y prontos a seguir aquellas tareas, y en medio de una borrasca política, que consterna hoy a todos los hombres verdaderos amantes de la libertad, se presenta a la palestra de un pueblo ilustrado como el de La Habana a sostener con todo el carácter y firmeza propias de un liberal exaltado, la preciosa joya que cuatro coronas conjuradas nos quieren arrebatar.» En el prospecto expresan, además, que se proponen «reformar en alguna parte las costumbres de nuestra patria»; que la crítica «llenará también su merecido huequecito, pues nadie mejor que ella sabe refrenar los abusos y pasos tortuosos de la sociedad», y que la poesía «ocupará igualmente algunas de nuestras páginas, procurando que sea siempre de los autores más selectos». Se ignora cuándo comenzó a publicarse, pues en su frontis no aparecían ni el día ni el mes en que se editaba cada número. Joaquín Llaverías señala, en la página 418 del tomo 1 de su Contribución a la historia de la prensa periódica (La Habana, Talleres del Archivo Nacional de Cuba, 1957), lo siguiente: «Mas si recordamos que comenzó después de «desembarazados ya de las ocupaciones que hicieron suspender su publicación» a los «redactores del Americano Libre», que fueron los mismos que continuaron con El Revisor Político y Literario, y que este último dejó de publicarse el 30 de agosto de 1823, no resulta equivocado conjeturar que El Liberal Habanero diose a luz después de la fecha antes expresada, no continuando, de seguro, por haberse abolido la ley sobre libertad de imprenta.» Se editaba dos veces a la semana, con el siguiente epígrafe: «La libertad es hija de la ilustración, y ésta también lo es de aquélla.» Llegaron a publicarse 16 números. En el último de ellos se leía la siguiente nota: «Con este número se completa el último del segundo mes, y se suspende por ahora la publicación de este periódico.» Aparecían en sus páginas artículos de carácter político, sobre moral, costumbres, etcétera, así como poesías y otros trabajos de interés literario. Casi todas las poesías eran firmadas por Tirzo (seud. de Mariano Ortiz?). Los restantes colaboradores firmaban con sus iniciales y con seudónimos: L. R., S. L. J., J. R. R., L. C. E., El cuentista, El mismo, El observador, Un español americano. Joaquín Llaverías incluyó, en las páginas 416-418 de su obra antes citada, el sumario de todos los trabajos publicados en cada uno de los dieciséis números.

Recurso: Diccionario de la Literatura Cubana on Buho.Guru