El Mensegero (sic!) Semanal

(New York, 1828; Filadelfia, 1828-1829; NewYork, 1829-1831). Revista. El Primer número apareció el 19 de agosto. Aunque en la publicacion no consta, se sabe que fue redactada por José Antonio Saco y Félix VareIa. El primer número se editó en Nueva York; entre los números 2 y 32 en Filadelfia, y a partir del número 33 y hasta el final, de nuevo en Nueva York. De contenido variado, publicó trabajos sobre política internacional, arquitectura, industria, historia, ciencias naturales, geografía. Reprodujo noticias y comentarios relacionados con la guerra que se desarrollaba en Suramérica, así como acontecimientos notables de los Estados Unidos de Norteamérica. En su sección «De los ocios» insertó trabajos sobre literatura española, y poemas del español Juan Nicasio Gallegos. Aparecieron comentarios sobre las poesías de José María Heredia. Publicó además pequeñas piezas teatrales. También dio a conocer el movimiento teatral parisién y traducciones de artículos editados en la prensa extranjera. José M. Labraña señala, en las páginas 669 y 670 de su trabajo «La prensa en Cuba» -aparecido en Cuba en la mano. Enciclopedia popular ilustrada (La Habana, Úcar, García, 1940, p. 649-786)-, que fueron sus colaboradores Manuel del Socorro Rodríguez, Gaspar Betancourt Cisneros, Tomás Gener, Ramón Vélez Herrera y José Estévez. En el último número publicado, que vio la luz el 29 de enero de 1831, se hace constar: «No son motivos políticos, sino otros de distinta especie los que obligan al redactor del Mensagero [sic] a terminar su publicación. La generosidad de los individuos que se suscribieron a él, miróla su redactor como un honor que se hacía a su persona, y una protección que se dispensaba a su periódico. Reciban pues todos ellos el homenage [sic] sincero de su gratitud, pero recíbanle más cordialmente los que desde el principio hasta el fin han sido siempre suscriptores a el Mensagero.» Después de insertar una lista de los que a principios de enero de 1831 estaban suscritos a la publicación en la ciudad de La Habana, se señala: «Quisiera también poder imprimir la lista de los suscriptores de Matanzas, pero no sabiendo acerca de este particular ninguna otra cosa sino que el S. Gobernador D. Cecilio Ayllón echa un embargo a los Mensageros [sic] inmediatamente que llegan a esa ciudad, que los arresta después en su casa por algunos días o semanas, y que sólo los pone en libertad cuando ya los considera purgados del veneno con que pudieran infestar a Matanzas, me veo privado del placer que tendría en dar a aquellos vecinos un expreso testimonio de mi gratitud.» Expresa Carlos M. Trelles, en la séptima parte de su trabajo «Bibliografía de la prensa cubana (de 1764 a 1900) y de los periódicos publicados por cubanos en el extranjero» -en la Revista Bibliográfica Cubana (La Habana, 3 (16): 163, jul.-ago., 1939)-, que «El Gobierno español calificó su circulación en la Isla de sospechosa y esto precipitó la muerte de esta notable publicación, en donde salieron a la luz valiosos escritos». Aparecieron tres volúmenes.

BIBLIOGRAFÍA Camacho, Pánfilo D. «Fundación de El Mensajero Semanal», en su José Antonio Saco. Estudio biográfico. La Habana, Molina [s.a.], p. 18.

Recurso: Diccionario de la Literatura Cubana on Buho.Guru