El Mundo Nuevo

(New York, 1871-1876). «Enciclopedia ilustrada de ciencias, artes, literatura, educación, industria, comercio, etc., etc.», se lee en el primer ejemplar publicado, correspondiente al 25 de mayo. Presentaba formato de revista. En la portada inicial que acompañaba cada volumen y que presumiblemente era entregada a fin de año junto con un índice general de los trabajos publicados, se decía: «Enciclopedia ilustrada de política, ciencias, artes, literatura, modas, industria y educación.» Era su director Enrique Piñeyro, a quien se une José M. Mestre desde el número 25. Ambos aparecen como editores. Su salida se efectuaba los días 25 de cada mes. A partir del número 6 comenzó a salir quincenalmente. En el primer número se manifestaba: «No puede espresar [sic] cabalmente nuestro propósito este número inicial del Mundo Nuevo; apenas si basta a dejarlo comprender. Las dificultades y complicaciones que forzosamente trae consigo la aparición de un periódico por vez primera, nos ha impedido realizar por completo nuestro pensamiento. Secciones hay, a que siempre daremos importancia capital, que no aparecen abiertas todavía. La industria, la agricultura, las grandes invenciones que cada día mejoran y corrijen [sic] los procedimientos en todas las artes útiles, la Instrucción pública, piedra angular del bienestar de todas las naciones, los mil y mil resortes que dan impulso, agrandan la esfera de acción y multiplican la fuerza de los pueblos en su marcha hacia el grado más alto de progreso, -han de ser notados y seguidos de cerca por nosotros, para tener de todo ello siempre al corriente a nuestros lectores-, y casi no podemos decir que hemos comenzado a hacerlo desde hoy. El Mundo Nuevo será además un periódico esencialmente «artístico y literario, original y americano, combinando siempre en sus columnas todas las manifestaciones de lo Bello, ligando sus grabados con sus artículos y escogiendo unos y otros de modo que interesen, agraden e instruyan a los lectores a quienes especialmente está dirigido.» Y más adelante se señala: «Estudios literarios, biografías de personajes célebres, composiciones poéticas de relevante mérito, críticas de cuantas obras se publiquen de interés general o americano, viajes, noticias literarias, novelas, bien traducidas o bien originales, pero en uno y otro caso especialmente preparadas para nuestro periódico, -se encontrarán siempre en las columnas del Mundo Nuevo.»Publicó poemas, cuentos, noveletas, cuadros de costumbres, trabajos científicos, históricos, literarios, geográficos, piezas teatrales y artículos de interés general. Mantuvo las secciones «Bibliografía», con comentarios sobre las últimas publicaciones, «Prensa ilustrada de Europa», que condensaba artículos y noticias aparecidos en la prensa extranjera, y «Revista general», donde se trataba sobre la marcha de los sucesos contemporáneos. La revista se destacó por la profusión de sus grabados e ilustraciones. Se hizo eco en sus páginas de los acontecimientos políticos que sucedían en Cuba y dio cabida a noticias y referencias sobre la guerra cubano-española. Entre sus colaboradores figuraron Antonio Bachiller y Morales, Francisco Javier Cisneros, F[rancisco] y Antonio Sellén, Ignacio Escoto, Leopoldo Turla, Rafael María Mendive, José Antonio Echeverría, José Joaquín Palma, Manuel Sanguily, José Ignacio Rodríguez, Antonio Zambrana y Pedro J. Guiteras. Este último, durante varios números, mantuvo la sección «Estudios de literatura cubana». En el número 69 (correspondiente al 15 de mayo de 1874) apareció una nota en la que se indicaba: «Con este número cerramos el cuarto volumen de nuestro periódico. El Mundo Nuevo cesa desde hoy de aparecer como publicación separada, quedando reunido a La América Ilustrada, también de Nueva York, y formando un nuevo periódico, de que será editor-propietario el señor J. C. Rodrígues [sic], y que abarcando ambos títulos y las respectivas condiciones de cada una de las dos publicaciones, comenzará a salir desde el día lº del entrante mes. Los que hasta ahora han sido editores de El Mundo Nuevo continuarán colaborando asiduamente en el nuevo periódico...» Prosiguió con la numeración de La América Ilustrada, por lo que el siguiente número fue el 76. Su periodicidad fue decenal. En el número 88 (lº de octubre de 1874) apareció una nota en la que se hacía constar que desde dicho número la redacción y dirección de la revista volvían a estar en manos de Enrique Piñeyro. Siguió siendo su editor J. C. Rodrígues [sic]. Entre los números 96 y 99 fungieron como directores José M. Mestre e I[saac] Carrillo, y entre el 100 y el 105 figuraron en tal cargo el propio Carrillo y E[ugenio] M[aría] de Hostos. Desde el número 97 su periodicidad pasó a ser quincenal. Entró a formar parte de la dirección, desde el número 107, además de Carrillo, F[rancisco] Sellén. Piñeyro tomó nuevamente la dirección de la revista desde el número 119 hasta su desaparición.. La tónica de la publicación siguió siendo la misma, aunque se hace más constante la colaboraci6n de escritores hispanoamericanos (Ricardo Palma, Rafael Pombo). Otros colaboradores de esta etapa fueron Diego Vicente Tejera, Luis Victoriano Betancourt, J[osé] M[aría] Céspedes. Publicó póstumamente algunos poemas inéditos de Juan Clemente Zenea. Continuaron apareciendo las mismas secciones, traducciones de poetas -fundamentalmente ingleses y alemanes-, trabajos sobre arte, lingüística, instrucción pública, etcétera. La publicación fue suspendida con el número 144, correspondiente al 15 de diciembre de 1876. En total aparecieron siete volúmenes. Bajo la responsabilidad de Araceli García Carranza se ha confeccionado el índice de la América Ilustrada, que incluye también la etapa en que salía como El Mundo Nuevo-La América Ilustrada. El mismo se encuentra a disposición del público en las gavetas de la hemeroteca del departamento de Colección Cubana de la Biblioteca Nacional «José Martí».

Recurso: Diccionario de la Literatura Cubana on Buho.Guru