La Aurora de Matanzas

(Matanzas [1828-1857]). Periódico que, según señala Carlos M. Trelles en la primera parte de su trabajo «Bibliografía de la prensa cubana (de 1764 a 1900) y de los periódicos publicados por cubanos en el extranjero» -en Revista Bibliográfica Cubana (La Habana, 2 (7): 37, ene.-feb., 1938)-, comenzó a salir el 2 de septiembre de 1828. Trelles también expresa que era propiedad de la Diputación Patriótica, la que aceptó la oferta del impresor Antonio Pereira de editarlo en sus talleres. Lo redactaba, según el propio Trelles, José Pereira, hermano del editor, a quien auxiliaban Félix M. Tanco, José Ibarra, José B. Ponce, Jaime Badía y José M. Casal. Salía tres veces a la semana. En el número correspondiente al 3 de enero de 1829 (ejemplar más antiguo encontrado) se expresa que «se insertarán en él todas las noticias y asuntos de oficio». Se han podido revisar todos los números del primer semestre de 1829. En los mismos aparecen, además de las disposiciones gubernativas, noticias reproducidas de periódicos de España y del resto de la isla, así como numerosos trabajos de índole literaria. Antonio M. Maicas señala, en su trabajo «El periodismo en Matanzas» -incluido en el Álbum del cincuentenario de la Asociación de Reporters de La Habana (La Habana, Editorial Lex, 1952, p. 68)-, que La Aurora de Matanzas «fue el primero de los periódicos cubanos que publicó crónicas de guerras extranjeras. La amistad de su director con los dirigentes del Corier des Etas Unis [sic], le permite publicar valiosas y originales crónicas sobre la guerra entre Turquía y Rusia, que hoy son páginas curiosísimas del periodismo de antaño». Antonio Bachiller y Morales indica, en la página 228 del tomo 2 de su obra Apuntes para la historia de las letras y de la instrucción pública en la isla de Cuba (La Habana, Academia de Ciencias de Cuba. Instituto de Literatura y Lingüística, 1971), lo siguiente: «Fue el mejor periódico político y literario de esta Isla hasta esa fecha. Contribuyó visiblemente al adelanto en el periodismo en la esencia y hasta en la belleza de las formas.» En enero de 1831, según refiere Trelles en su citado trabajo, ¡José Pereira se separó del periódico para fundar El Lucero de Matanzas y se hizo cargo entonces de su impresión Tiburcio Campe, quien lo dirigió en esta segunda época (desde el lº de marzo de 1831 hasta septiembre de 1833). Añade Trelles que con Campe colaboraron los ya mencionados Tanco, Casal y Badía, así como Domingo del Monte, F[rancisco] Guerra y los redactores del Diario de Matanzas y del [Diario] Español de Nueva Orleáns, a los cuales José M. Labraña añade, en la página 655 de su trabajo «La prensa en Cuba» -publicado en Cuba en la mano. Enciclopedia popular ilustrada (La Habana, Úcar, García, 1940, p. 649-786)-, los nombres de Francisco Iturrondo, Plácido (seud. de Gabriel de la Concepción Valdés), José Jacinto Milanés, Sebastián Alfredo de Morales. De su tercera época -iniciada el 1º de octubre de 1833, nuevamente bajo la dirección de José Pereira, quien además se ocupaba de la redacción-, se ha revisado hasta diciembre de 1834. Aparecen en ese período colaboraciones de Delio (seud. de Francisco Iturrondo), Desval (seud. de Ignacio Valdés Machuca), Un aficionado a las musas (seud. de José Severino Boloña), B[achiller] T[oribio] S[ánchez] de A[lmodóvar] (seud. de Domingo del Monte), Ramón de Palma, Manuel González del Valle, Blas Osés y otros. Trelles afirma, en su varias veces citado trabajo, que la dirección de José Pereira se extendió hasta junio de 1838. Añade, además, que su cuarta época se inició el 5 de julio de 1843; la quinta el 1º de marzo de 1847; la sexta el 3 de agosto de ese mismo año y la séptima en enero de 1849. Según se desprende del trabajo de Trelles, su título, así como su subtítulo y formato, sufrieron diversas alteraciones durante su larga trayectoria. También refiere Trelles que, a partir del 1º de agosto de 1857, después de refundirse con otro periódico de la ciudad titulado El Yumurí, adoptó el título de Aurora del Yumurí, con el cual salió hasta 1900. Pedro José Guiteras expresa, en la página 161 del tomo 2 de su Historia de la isla de Cuba. Con notas e ilustraciones (Nueva York, Jorje [sic] R. Lockwood, F. W. Christern, 1886), que la reforma en el periodismo cubano comenzó en 1828 con La Aurora de Matanzas, «diario político y literario digno de elojios por la elegancia de su impresión y su estensión, la variedad de materias que abraza i el orden i buen gusto de su redacción, i puede estimarse sin disputa el príncipe de nuestros periódicos» [sic].

Recurso: Diccionario de la Literatura Cubana on Buho.Guru