catedral
El adjetivo del latín tardío cathedralis se aplicaba a la iglesia que, con rango superior, guardaba en su interior la cátedra o trono del obispo, y así se mantiene en la denominación oficial de este tipo de templos: Santa Iglesia Basílica Catedral, donde se mantiene la función de adjetivo de las palabras santa, >> basílica y, como decimos, catedral. La sustantivación posterior es sólo fruto de una elipsis de «la (iglesia) catedral».
Como ocurre con las palabras >> cátedra y >> cadera, catedral procede del latín vulgar cathégra, una variante del latín cathédra, la 'silla' (entre otros significados), tomado del griego kathédra, 'el asiento, la sede'.
Diccionario del origen de las palabras