primavera
En latín arcaico primavera era, simplemente, vera. Los antiguos romanos, seguramente por el hecho de que su llegada supone el inicio de una nueva vida en plantas y animales, consideraban a la primavera la estación más importante y le otorgaban el privilegio de ser la primera del año, que, antes de la reforma del calendario llevada a cabo por Julio César en el 45 a. C. (>> enero y julio), empezaba con el mes de >>marzo. No olvidemos tampoco que el zodiaco considera el signo de Aries el primero de la serie. Por esta razón, se creó el compuesto primo vere, convertido en latín vulgar en primavera(m), algo así como 'la primera primavera', frente a veranum tempus (>> verano), 'tiempo primaveral'.
Primavera(m) acabaría por instalarse en la práctica totalidad de las lenguas neolatinas, exceptuando el francés, que eliminó la redundancia en printemps, 'primavera', literalmente 'el primer tiempo'.
Diccionario del origen de las palabras