hombre
Reprueban algunos, y entre ellos CAPMANY, que se diga Fulano es el hombre de España, o Fulano es el primer hombre de España, para denotar antonomásticamente el sujeto más eminente del país, el que tiene digámoslo así, el principado de la popularidad, del merecimiento y la gloria. Y se funda para ello en que tales expresiones, anfibológicas en su sentir, antes que dicha idea, expresan la de que Fulano es el único hombre de su sexo entre las hembras y los animales de España; o bien la de que Fulano fue el primero que pobló a España.
No estoy conforme con esta opinión; pues aunque no me gusta Fulano es el hombre de España, por Es el hombre principal, el más distinguido, el más eminente de España, todavía creo que cuando se dice Fulano es el primer hombre de España se da a entender perfectamente esto último sin riesgo de equívoco: lo primero, porque el verbo SER en presente evita la anfibología; lo segundo porque PRIMERO significa excelente, grande, y que sobresale y excede a otros.
En buen castellano se dice EL HOMBRE DE UN SIGLO al que en su edad ha sido singular o sobresaliente. ¿Por que, pues, no ha de ser permitido decir El hombre de su nación, El hombre de un pueblo, al que en su pueblo o nación es singular, o sobresale?
Finalmente, EL PRIMER HOMBRE DEL MUNDO es expresión castellana con que se pondera que alguno es excelentísimo o de especialísima habilidad en la materia de que se habla.
Diccionario de galicismos