tropezar
"El mundo nunca tropieza
la flor entre los abrojos:
no: sus imbéciles ojos
no pasan de la corteza."
Hallo dos vicios galicanos en esta preciosa redondilla.
1.º El verbo castellano TROPEZAR, como neutro, nunca va sin régimen: no tropieza uno alguna cosa, sino que tropieza con, contra o en alguna cosa. Este vicio proviene en nuestros poetas modernos del recuerdo del verbo francés heurter: v. gr.: Ce vaisseau a heurté l'autre; Le monde ne heurte jamais la fleur parmi les ronces.
2.º En francés acaso se pueda decir imbéciles a los ojos, porque imbécile tiene la acepción de débil con relación a lo físico lo mismo que la de débil con relación a lo moral e intelectual; pero propiamente en castellano ojos imbéciles son ojos sin razón; y el poeta solo ha querido decir torpes, de corta vista, débiles, etc.
"Hasta el punto de no haber alma viviente que las tropiece (las verdades) en ninguno de los dominios del arte" leo en un excelente escrito. No olvidemos que en castellano TROPEZAR es únicamente neutro, o recíproco.
Diccionario de galicismos