Guárdese del pobre el rico, pues no hay enemigo chico.

Aconseja permanecer siempre alerta ante el peligro, por pequeño que éste parezca. Ya lo advertía otro refrán judeoespañol: Si tu enemigo es una hormiga, cátalo como a un camello.

Recurso: Diccionario de refranes, dichos y proverbios on Buho.Guru