Por la mañana, la siembra; y por la tarde, la hembra.

Enseña que conforme a este horario se ha de visitar, respectivamente, a la una y a la otra, para hallarlas en plenitud de lozanía. También se utiliza para indicar que cada cosa tiene su momento en el día.

Recurso: Diccionario de refranes, dichos y proverbios on Buho.Guru