palidecer
Del verbo francés pálir, volverse pálido, ponerse descolorido, perder el color.
Tengo por necesario este vocablo, pues sólo con él se pueden evitar las circunstancias a que es forzoso acudir cuando queremos expresar la idea que envuelve. Lo mismo digo de la forma EMPALIDECER, deducida, como la anterior, del latín: porque efectivamente, en esta lengua, madre legítima de la nuestra, pallescere y expallescere valen lo mismo uno que otro.
QUEVEDO ha dicho en el mismo sentido palidezar; pero no me gusta.
"La vió, y al verla se sonrojó, palideció y temblando de súbita emoción paróse inmóvil: quiso hablar y no pudo. Al fin rendido cayó a sus pies llorando; y más sublimes que la voz los ojos, con arte no aprendido revelaron su amor y sus enojos cuando el labio cobarde enmudecía."
Pudieran ser mejores estos versos; pero dudo que las ideas contenidas en los dos primeros se expresen con más concisión por medio de ningún otro artificio de lenguaje. Puede muy bien decirse:
"La vió, y al verla se sonrojó, perdió el color: temblando de súbita emoción, etc."
pero cualquiera conoce que esta variante amengua la nobleza de la expresión, y hace desaparecer el contraste que resulta de pasar de un color al opuesto, como en este verso de RACINE.
Je le vis, je rougis, je pallis à sa vue.